Una vez cerrada la temporada, una buena opción, aparte de barbos, lucios o bass, es ir por las gordas arco iris. Podemos disfrutar tanto en pequeños lagos artificiales como en embalses de estas verdaderas bestias. Muchas veces infravaloradas, las arcoiris son auténticos cañones. Sus ataques no son envidiables a los de basses o lucios y su lucha es magnífica. Nunca se dan por vencidas.

Podemos pescarlas tanto con streamers, secas o ninfas de quironómido. A mi especialmente me encanta darle caña al streamer y sentir sus brutales ataques. Y si ademas damos con una gorda la diversión está asegurada.

Aunque sean de repoblación no debemos ir con la idea de que coser y cantar, sobre todo si nos encontramos en embalses.

Normalmente se mueven en grupos así que dar con ellos será la clave del éxito. Debemos ir preparados para pescar en cualquier capa de agua. También será muy importante dar con el color ideal. En esto son algo caprichosas y de un color a otro podemos pasar del fracaso al éxito en cinco minutos.

Debemos ir metalizados a tener que adaptarnos a cualquier circunstancia y pescar en función de la claridad, viento, actividad, etc........

En definitiva, una pesca muy divertida y otra opción para no tener que dejar en el olvido por un tiempo nuestros equipos.