Como bien sabéis la pesca a mosca es de las modalidades mas polivalentes, pues con ella se puede casi todas las especies tanto de agua dulce como salada. Sin duda, esto es lo que más me gusta de pescar a mosca.

El verano es una de mis estaciones favoritas para perderme por ríos de montaña e ir a tentar a nuestras amigas las pintonas. Son muchos los kilómetros y las horas que la dedico ya que no hay mejor lugar para pasar las largas jornadas calurosas de los meses de Julio y Agosto.

En una de las últimas salidas de pesca tras ellas  logré capturar uno de las capturas que más ilusión me han hecho hasta la fecha. Este ejemplar de trucha fario salvaje es mi record hasta la fecha.

La jornada estaba siendo bastante fructífera iba pescando con mi caña guideline LPX. Una caña diseñada para pescar a ninfa pero que es super super versátil. La he utilizado para pescar a ninfa, seca y también con streamers. Los resultados con las tres modalidades ha sido sobresaliente. Una delicia en cuanto a calidad precio.

Ese día había tenido buenos ataques y capturas gracias a un pequeño streamer. Después de un varón en la actividad decidí cambiar pescar a ninfa y despacio buscándolas en cada hueco.
Decidí ir a un pozo en el que sabia podia ver alguna buena sorpresa. Empecé a pescar en cabecera lanzando a la corriente y dejando derivar las ninfas corriente abajo en abanico. Después comencé a otear un blando al lado de la corriente una zona caliente. Tras varias pasadas noté una gran tensión. Al principio no sabia si se trataba de una rama, alga o pez.... pero pronto noté unos cabeceos inconfundibles. La batalla fue increíblemente bonita u tira y afloja lidiando con la vegetación subacuática. Tras minutos y minutos de lucha logré echarla a la sacadora con la inestimable ayuda de mi padre. Una preciosidad de pez que tras un par de fotos fue liberada a su casa para que siga creciendo y dando vida al rio y quién sabe los mismo el año que viene pueda volver a disfrutar de su potencia....